Estas son las fotos de una sesión que tuve con Altivo la semana pasada. Había estado teniendo problemas con su ansiedad y frustración pero poco a poco vamos superándolos. Cuando vas a ver a tu caballo sin ninguna expectativa, las expectativas suelen superarse con creces. Yo soy una persona poco activa físicamente, pero bastante activa mentalmente, y me cuesta mucho dejar atrás los problemas personales, los estudios, o simplemente sentimientos que tenga ese día para centrarme exclusivamente en lo que estoy haciendo. Altivo me ayuda a lograrlo, a disfrutar del momento con él, sin nada más en nuestras mentes que el otro. Mi otra mitad. La tarde más relajada que hemos pasado juntos hasta el momento.
Aún no tenemos señal para tumbarse, pero la introduciremos dentro de poco, ya que lo hace a menudo y parece disfrutar de esos pequeños momentos de tranquilidad, sabiendo que nada malo le va a ocurrir. La confianza es imprescindible.
La relajación y una postura saludable durante el paso y el trote es uno de nuestros principales objetivos.
Por supuesto siempre hay tiempo para mimos
Y por último pero no menos importante, mis dos fotos favoritas del día. Hemos estado los tres últimos meses trabajando en libertad y sin fustas apuntando a ninguna parte de su cuerpo y, aunque creí imposible una correcta incurvación y postura bajo dichas condiciones, estas dos fotos hablan por si solas. No son el mejor ejemplo para nada, pero son un gran paso para Altivo.
Me cuesta creer que sea el mismo caballo que llegó a mis manos hace algo más de un año. Creo que hemos cambiado los dos... y por eso el cambio ha sido tan bueno.
Espero que os gusten. Un beso
Aún no tenemos señal para tumbarse, pero la introduciremos dentro de poco, ya que lo hace a menudo y parece disfrutar de esos pequeños momentos de tranquilidad, sabiendo que nada malo le va a ocurrir. La confianza es imprescindible.
La relajación y una postura saludable durante el paso y el trote es uno de nuestros principales objetivos.
Por supuesto siempre hay tiempo para mimos
Y por último pero no menos importante, mis dos fotos favoritas del día. Hemos estado los tres últimos meses trabajando en libertad y sin fustas apuntando a ninguna parte de su cuerpo y, aunque creí imposible una correcta incurvación y postura bajo dichas condiciones, estas dos fotos hablan por si solas. No son el mejor ejemplo para nada, pero son un gran paso para Altivo.
Me cuesta creer que sea el mismo caballo que llegó a mis manos hace algo más de un año. Creo que hemos cambiado los dos... y por eso el cambio ha sido tan bueno.
Espero que os gusten. Un beso