En las cuencas mineras asturianas,las minas se confunden con las casas y con sus gentes.Los habitantes de estas zonas,conviven a diario con el mundo del carbon,y es muy dificil encontrar a nadie que no tenga en su familia uno o muchos mineros.Se nace y se vive por y para el carbon.Los niños aprenden enseguida a apreciar el calor de la cocina de carbon,un carbon que quizas picó su propio padre o su abuelo.Se crece jugando en las escombreras de las minas,y oyendo a los mayores contar historias de la mina,de los buenos mineros,de las tragedias que salpican la historia de la mineria.Los jovenes ansian el trabajo de la mina para poder disponer de dinero ,para poder formar sus propias familias y prorrogar asi la herecia cultural que recibieron de sus gentes.
Toda una forma de hablar,.Todo un cancionero,toda una cultura se mezcla con las minas y los mineros,haciendo suya todo lo relativo al trabajo de las minas.Las minas adquirieron el nombre de los pueblos,y los pueblos nuevos tomaron el nombre de las minas.
Los mineros asturianos llevan el polvo del carbon impreso en sus genes..Se traga carbon,se escupe carbon incluso muchos dias despues de abandonar las minas.Los mineros llevan el carbon en su propio cuerpo,incrustado en los pulmones,debajo de la piel,en forma de innumerables cicatrices azules,carbon en las heridas..
Gracias al carbon se crian nuestros hijos,y se mueren nuestros hombres.Grandes tragedias han asolado las minas asturianas,llevandose por delante la vida de nuestros jovenes.Otros,en forma de muerte lenta,pierden la salud con la silicosis y las invalideces.
Estas minas de montaña,cerradas hace tiempo,dieron de comer a varias generaciones de hombres,no solamente asturianos,sino venidos de toda España y Portugal.Pero estos hombres pagaban muy caro el pan de sus mujeres e hijos.En otros tiempos,soportaban largas y agotadoras jornadas en el interior de minas como esta,mal comidos y peor vestidos,calzados con madreñas de madera y en unas condiciones sociales y laborales tercermundistas.Los hombres salian muchas veces de noche de su casa para ir a la mina,regresando una vez anochecido,tras dos o tres o cuatro horas de viaje andando hasta el grupo,y no viendo la luz del dia mas que los domingos.
Maria,curiosa comparacion la tuya..efectivamente,cada una de estas minas es una cueva de Ali-babá.,repleta de tesoros,pues gran tesoro es el carbon que la montaña encierra,pero no menos cierto es que tambien la mina se puede convertir en prision y muerte para el minero que ,como Cassem, olvida la contraseña de la seguridad o tiene la desgracia de estar en el peor sitio en el peor de los momentos.Pues en la mina,los peligros son mas de cuarenta,y el gas grisú y el monoxido de carbono son mas peligrosos y traidores que el peor de los ladrones de las mil y un noches.
Las minas tienen nombre de mujer...Mina Nicolasa..Mina Maria Luisa..y las capas o filones de carbon tambien tienen nombre de mujer..Maria...Vicentera..Jacoba....siempre femenino,pues en la mina todo es femenino.
La minas asturianas son madres para sus hijos,pues los alimentan,pero tambien son madrastras,que los ,maltratany los destrozan por dentro.No en vano se las ha descrito como "hacedoras de viudas y huerfanos.."
Un cantar de los miles de cantares mineros..
"En el fondo de la mina
miré al cielo y nun lu ví..
Santa Barbara bendita
nunca te apartes de mí..
¡Qué gran dolor.
que el mineru muere,madre,
por arrancar el carbon !
Mañana sin falta saco esas fotos ..
Un saludo.Gabino