Re: Botas de Doma Clásica.
Las botas de doma no suelen precisar de engrase. Si lo necesitasen, debe ser un aceite de baja viscosidad y bajo índice de acidez. Una opción fácil es la del aceite de baño. Tras el engrasado, en el caso que fuese necesario, debe limpiarse el exceso con un jabón de glicerina, para retirar el exceso de grasa de la superficie brillante del cuelo (se llama flor). Una vez completamente seco el cuero, aplicar betún para darle brillo. Lo mejor es emplear uno incoloro para no manchar la montura.
Tras la monta, en el caso de que las botas se hubiesen humedecido con el sudor del caballo, debe limpiarse con una esponja empapada en agua, El sudor es ácido y termina por destrozar el cuero, a menos que se neutralice. Eso mismo es aplicable a las cabezadas y al resto de los cueros. El agua no los perjudica. Por último, dejar secar a la sombra alejado de fuentes de calor
Saludos,