Se ve que ganas no te faltan si sales tres veces a la semana.
Sil bien te ha dicho: hay que aprender con criterio tomando clases.
Lo que yo haría:
1. Compararía un caballo de compañía o un poney para no dejar a tu caballo solo en el prado.
2. Los dejaría allí a los dos unos meses largos… (unas vacaciones les puede venir bien siempre).
3. Mientras tanto tomaría clases de equitación con un profesional contrastado.
4. Le hablaría de mi caballo a mi profesor.
5. Después de 6 meses de clases, dejaría el caballo en la hípica unos seis meses más. (Para que lo domen. Toma nota: un caballo montado, no es un caballo domado. El último es medianamente seguro. El otro… podrá fácilmente hacerte perder la afición en el mejor de los casos.)
6. Después de este año y de montar todos los caballos de la hípica, montaría a tu caballo siempre y cuando tu profesor supervise este proceso.
7. Para tener autonomía y poder llevarte el caballo a tu casa y montarla sola, este año podrá ser corto. (Depende mucho de ti, y de serio que quieres tomarte esto. Hay muchos que dirá que exagero. Hay pocos que dirán que un año es muy poco tiempo para tener autonomía y montar tu propio caballo por el campo. En función del nivel de equitación que tendrás, tu misma dará la razón a unos o a otros).
8. Procura este año (y toda la vida) aprender algo mas sobre los caballos y no solo montar.
Si me permites, tu caso es bastante común y tiene varios finales:
Un día te tirará o te caerás y dejarás el caballo “tirado” en un campo. Poco a poco perderás la afición.
Un día te tirará o te caerás y dejarás el caballo “tirado” en una cuadra. Poco a poco perderás la afición.
Un día te tirará o te caerás y dejarás el caballo “tirado” en una cuadra o en el campo. Te romperás dos tres costillas, venderás el caballo y nunca mas montarás.
Un día te tirará o te caerás y dejarás el caballo “tirado” en un campo o en una cuadra. Poco a poco perderás la afición, pero mientras tanto, aconsejada por "señores cabalistas" le pondrás tanto hiero en la boca que se volverán locos los detectores de metales del aeropuerto más próximo. (Y no servirá de nada.)
Un día te tirará o te caerás. Si te lesionas y superas bien esto, irás a una hípica y aprenderás en condiciones. Después disfrutarás mucho del caballo.
Seguirás montando, y no harás caso a nadie, especialmente a los que te han aconsejado bien. Más temprano o más tarde te darás cuanta que tu estás luchando y no haciendo equitación. Tendrás tantos vicios, que te cobrarán triple (y con razón) para quitártelos todos.
Yo acabo con dos frases más, para que puedas soltar esto de…. “Vaya que pesado eres tío..”
Una persona inteligente aprende de sus propios errores.
Una persona sabia, aprende de los errores de los demás.