Hace poco he comenzado con un potro y como ejercicio para apuntar el plan que voy siguiendo y además ayudar a que algunos resuelvan dudas para problemas parecidos o que otros me den su punto de vista me he decidido a poner aqui cada cierto tiempo el trabajo que se le hace y los problemas que presenta el caballo en su doma hasta que quede bien echao p'alante, es decir que conozca las ayudas y que marche bien a los tres aires.
Para empezar tengo que marcarme el objetivo, que no es otro que el que ya he mencionado, es decir, mi misión es prepararlo para la siguiente fase de doma y para ello el caballo debe conocer las ayudas de las manos, piernas y asiento y marchar bien a los tres aires. Con lo de bien me refiero a que busco que el caballo vaya "recto, calmado y hacia delante".
El potro que me encuentro ya está montado y por tanto no reacciona con botes u otras defensas. En cuanto al fisico me encuentro con un caballo de talla media, cruzado "mil sangres" y castaño sin marcas excepto un lucero en la frente. Tiene un buen dorso y un cuello adecuado aunque no sea sobresaliente. El defecto más importante que se ve en el fisico de este caballo es su debilidad general. Con esto me refiero a unos huesos delgados y un cuerpo de complexión debil y poca envergadura. En lo referente a su psique es un caballo con muchos vicios de cuadra, como el del tiro del oso o la de morder todo lo que tiene a mano. Estos vicios espero que se vayan solucionando con el trabajo por lo que por ahora no le prestaremos más atención que al resto de la doma y si más adelante continua con ellos buscaremos una solución alternativa.
Usaré una montura de doma clasica y un filete con cierrabocas ya que el animal tiene tendencia a evadir la acción del filete abriendo la boca.
Una vez subido me encuentro que el caballo, que tiene en torno a 6 años, va adelante pero no va ni recto ni calmado por lo que mi primer objetivo inmediato es buscar la rectitud a medida que se va calmando con el trabajo. No prestaré atención a sus reacciones adversas a menos que sean agresivas y premiaré aquellas que lo merezcan ya que si abusamos del refuerzo negativo con este caballo no conseguiremos que se calme. Sin embargo tiene una gran virtud en su doma: la impulsión. Va adelante y de verdad por lo que no cortaré su avance ya que éste será mi principal aliado para ponerlo en la mano a medida que desarrolle la musculatura dorsal.
Para comenzar lo monto con un contacto muy suave ya que busco que se calme y parece ser que el filete le incomoda para ello. Sin embargo al ver que esta en cierto modo "verde" con las ayudas en ocasiones utilizaré las ayudas de forma heterodoxa para hacerle comprender lo que quiero de él además de usar una vara como "traductora" de mis piernas.
Como he dicho voy a buscar la rectitud y para ello lo primero que voy a hacer es ponerlo recto en el circulo, es decir, que vaya incurvado correctamente y en la linea que le marcan mis piernas. La rienda interior la usaré con más incidencia de lo normal hasta que coloque el cuello tal como lo deseo ya que la pierna aun no la conoce bien. Tan pronto como acepta la postura aligero el contacto de la rienda interna y lo premio. Por otro lado la externa la usaré como controladora de la incurvación o, en otras ocasiones, para empujar mediante la rienda de oposición para empujar la espalda hacia dentro del circulo. Esta ayuda exagerada de las riendas se ira atenuando a medida que vaya conociendo las ayudas del asiento y piernas. Éstas, por cierto, las uso para marcar la incurvación la interna y impulsar la externa ademas de controlar que la grupa no "derrape". La vara la uso por dentro y daré toquecitos en la espalda para acentuar la acción de la pierna interior. No se trata de castigar sino de llamar la atención sobre esa zona de su cuerpo. POr ahora este trabajo lo hago al paso en primer lugar y posteriormente al trote. En el momento que el caballo me acepta la posición incurvada de su cuerpo hago una transición al paso y lo cambio de mano para repetir la acción. Una vez hecho este trabajo a las dos manos salgo de la pista al paso con riendas largas observando que el caballo busca el contacto hacia abajo y delante. No voy directamente a la cuadra sino que doy un par de vueltas por las calles del club a fin de que no relacione salida de la pista con entrada al box. y hasta otro dia de trabajo.
Para empezar tengo que marcarme el objetivo, que no es otro que el que ya he mencionado, es decir, mi misión es prepararlo para la siguiente fase de doma y para ello el caballo debe conocer las ayudas de las manos, piernas y asiento y marchar bien a los tres aires. Con lo de bien me refiero a que busco que el caballo vaya "recto, calmado y hacia delante".
El potro que me encuentro ya está montado y por tanto no reacciona con botes u otras defensas. En cuanto al fisico me encuentro con un caballo de talla media, cruzado "mil sangres" y castaño sin marcas excepto un lucero en la frente. Tiene un buen dorso y un cuello adecuado aunque no sea sobresaliente. El defecto más importante que se ve en el fisico de este caballo es su debilidad general. Con esto me refiero a unos huesos delgados y un cuerpo de complexión debil y poca envergadura. En lo referente a su psique es un caballo con muchos vicios de cuadra, como el del tiro del oso o la de morder todo lo que tiene a mano. Estos vicios espero que se vayan solucionando con el trabajo por lo que por ahora no le prestaremos más atención que al resto de la doma y si más adelante continua con ellos buscaremos una solución alternativa.
Usaré una montura de doma clasica y un filete con cierrabocas ya que el animal tiene tendencia a evadir la acción del filete abriendo la boca.
Una vez subido me encuentro que el caballo, que tiene en torno a 6 años, va adelante pero no va ni recto ni calmado por lo que mi primer objetivo inmediato es buscar la rectitud a medida que se va calmando con el trabajo. No prestaré atención a sus reacciones adversas a menos que sean agresivas y premiaré aquellas que lo merezcan ya que si abusamos del refuerzo negativo con este caballo no conseguiremos que se calme. Sin embargo tiene una gran virtud en su doma: la impulsión. Va adelante y de verdad por lo que no cortaré su avance ya que éste será mi principal aliado para ponerlo en la mano a medida que desarrolle la musculatura dorsal.
Para comenzar lo monto con un contacto muy suave ya que busco que se calme y parece ser que el filete le incomoda para ello. Sin embargo al ver que esta en cierto modo "verde" con las ayudas en ocasiones utilizaré las ayudas de forma heterodoxa para hacerle comprender lo que quiero de él además de usar una vara como "traductora" de mis piernas.
Como he dicho voy a buscar la rectitud y para ello lo primero que voy a hacer es ponerlo recto en el circulo, es decir, que vaya incurvado correctamente y en la linea que le marcan mis piernas. La rienda interior la usaré con más incidencia de lo normal hasta que coloque el cuello tal como lo deseo ya que la pierna aun no la conoce bien. Tan pronto como acepta la postura aligero el contacto de la rienda interna y lo premio. Por otro lado la externa la usaré como controladora de la incurvación o, en otras ocasiones, para empujar mediante la rienda de oposición para empujar la espalda hacia dentro del circulo. Esta ayuda exagerada de las riendas se ira atenuando a medida que vaya conociendo las ayudas del asiento y piernas. Éstas, por cierto, las uso para marcar la incurvación la interna y impulsar la externa ademas de controlar que la grupa no "derrape". La vara la uso por dentro y daré toquecitos en la espalda para acentuar la acción de la pierna interior. No se trata de castigar sino de llamar la atención sobre esa zona de su cuerpo. POr ahora este trabajo lo hago al paso en primer lugar y posteriormente al trote. En el momento que el caballo me acepta la posición incurvada de su cuerpo hago una transición al paso y lo cambio de mano para repetir la acción. Una vez hecho este trabajo a las dos manos salgo de la pista al paso con riendas largas observando que el caballo busca el contacto hacia abajo y delante. No voy directamente a la cuadra sino que doy un par de vueltas por las calles del club a fin de que no relacione salida de la pista con entrada al box. y hasta otro dia de trabajo.