Hay varias soluciones... la más drástica, rociar la cama con algo que le desagrade, sin ser peligroso de ningún modo (por ejemplo algún producto amargo e inocuo).
La más natural es que coma algo más sabroso que la paja, en cuyo caso puede comisquear algo de la cama, pero dejando la suficiente para echarse, ya que no tiene el aliciente del hambre para terminarla... cuando el caballo ha comido alfalfa u otro heno sabroso, mira la paja con menos ansia.
También se le puede echar paja limpia en los lados de la cuadra, para que la coma, y mezclar la de la cama con otra que no esté fresca, o tan limpia como la otra (pero no manchada de estiércol ni orines, que perjudicarían los cascos)... así, puede ir distinguiendo de qué parte come, y en cuál se echa.
Siempre, si vemos que sale alguna paca de menos calidad o peor olor, la dejamos para la cama, ayudando así a que aprenda a no comer esta, y dejamos la más olorosa y apetecible para que coma, como contraste.
Yo solamente pongo cama en el lugar en que sé que se echa (suele ser el mismo siempre)... el resto, lo dejo limpio "de polvo y paja", salvo los lados y esquinas, en que le pongo la paja para comer. Cuando de vez en cuando veo que va a comer la cama, le muevo suavemente la cabeza, para que mire la de comer, y le digo " cómete aquella, amigo Kazak, que para eso está... esta es para dormir", y así, suele irse tranquilamente a por la de las esquinas, respetando la cama.