La inmensísima mayoría de las veces a los caballos se les castra extirpando los testículos. Para comprobar eso no necesitas un veterinario, sólo mirar entre las patas.
Ahora bien: ese "examen" no te garantiza que el caballo no tenga testículos, ya que existen los caballos criptorquidos: los testículos quedan dentro del cuerpo, no salen, y por tanto no se ven colgando en el escroto. A veces sólo baja uno y el otro queda dentro, y al castrar se elimina el externo y se deja el interno. La única forma de detectar testículos internos es con examen veteriario: anamnesis y analíticas, y alguna prueba de imagen.
Si lo que te interesa es que el caballo esté castrado por temas de fertilidad, si no ves los testículos no debes preocuparte, pues los internos tienen demasiada temperatura para producir espermatozoides fértiles, los criptórquidos son estériles. El problema de los testículos internos es que tienen un elevado riesgo de malignización, así que es conveniente vigilarlos e incluso intervenir quirúrgicamente para eliminarlos. Y si ves los testículos pero no te fías de que le hayan hecho alguna otra intervención tipo vasectomía o castracion química tendrás que recurrir a un veterinario para comrpbar si el caballo es entero "sin alterar" o no.