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Invitado
Hola. Me llamo Natalia. AVISO VIENE TOXO. Vivo en el sur de Francia, en la cerdaña, cerca de Andorra. Mi yegua Baraka des Hounts tiene 9 años, y es una trotona francesa pura raza, ha hecho carreras de trote, attelada y montada, la última en 2016, salta 120, y galopa perfectamente. Lleva conmigo poco más de tres meses, me la quede después de ver dos o tres caballos, de UNA yeguada donde nació, creció, se domo y se entreno por su única propietaria. Me la quedé por su carácter, dócil, pero con sangre a la monta. Todavía me acuerdo el día que la probé... Una p.. Locomotora. De ida de olla, le va la caña, como a MI, JEJJEJ. Es decir, Trabaja bien a pie, trabaja bien a la cuerda (tiene sus días) da las patas, se viste bien, se deja cepillar, llevándola de paseo con el ramal, la suelto por los prados a su bola, parece que no ha matado una mosca. Un borrico vamos. . Vive en casa, libre en la montaña. Va sin herraduras. Me hace alegrías cuando me ve, se ha creado un vínculo rápido, en una semana su nerviosismo incical tras el traslado desapareció. Es muy respetuosa, afectuosa y cariñosa. Muy cercana al humano, aunque a veces muestra su carácter algo dominante,intenta adelantarme o escoger el camino a seguir, con una pequeña advertencia, le enseño el extremo del ramal a su hocico. Yo hice dos años de equitacion hace 20 años en Valencia, clásica y algún salto, trabaje como colaboradora en una hipica con cientos de caballos que ayudaba a Pas torear y cambiar dee prado, montando caballos western y con varios caballos a reata, saliendo sola a trabajar caballos para que adelgazar an, etc. hasta que me vine a vivir aqui y dejé de montar.... Para hacerme profesora de esquí. Y ahora por fin tengo una casa donde tener un caballo.. Y me tiro a la piscina. Y aquí estamos Baraka y yo haciéndonos amigas, y adaptándonos la una a la otra. Después de una semana solo sacándola a pasear delnramal, empecé a montarla, el único problema es que le mola correr, y mucho, no me extraña siendo una excorredora, ay tengo que retenerla mucho, a la que suelto rienda, se acelera, modo carrera on, trote largissimo, y una vez calentita la yegua (sangre muy caliente) dile que se pare. y ahí empieza la guerra. Bueno, trabajándolo en picadero, (el campo de fútbol del pueblo) consigo un trote más retenido y sacarle el galope sin que pase por el modo trote carreras, como me pasa por caminos. Estoy empezando a ir a rienda suelta, sobre todo al principio del paseo, pero una vez ya la hago trotar galopar me cuesta mucho pararla y que quede quieta unos segundos. Se pelea con el hierro, llevo filete oliva partido y muserola sin cierrabocas, tengo que castigarle mucho la boca sin querer hacerlo. Para con la voz y asiento, responde a la orden pero si no la retengo de boca sale a andando antes de que se lo ordene. Entonces al retenerla, empieza a mordisquear el hierro, a intentar cojer la rienda con la boca a cabecear, todo esto termina en cuanto empieza a caminar, pero me cuesta ir tranquila porque si no la retengo, dale al trote, la voy calmando a lla voz cuando intenta salir, y se corta, pero voy intentando soltar rienda para que vaya tranquila, y al despiste sale al trote. Este aspecto ha mejorado bastante en las últimas dos semanas, pero pararle el calentón a veces es un calvario. Cabecea, muerde la rienda, se hecha para atrás, patalea con la mano, o rasca el suelo, de impaciencia por salir. Como veía tanta molestia por el hierro, he montado varias veces con el hackamore,, y va más tranquila, se cabrea menos, pero se me des boca más al trote y galope y me cuesta más retenerla. Con hackamore peleamos menos a causa del hierro, soy consciente de que quizás no soy muy fina de manos, pero es una yegua qqie tira mucho y si no la retengo se embala y se me acaban los caminos. Tanto con el hackamore como con el filete tengo el mismo problema, se para pero sale antes de ordenarlo, y patea y rasca con la delantera, intenta morder la rienda. Y hoy me lla ha liado parda. Llevo martingala, y le puse las tijerilllas por que me ayudan a que no levante tanto la cabeza. Ya he conseguido paseando trote y galope más retenido, incluso algunas cesiones, pero la parada y el respeto a los aires con rienda suelta.... Correr ccorrer. Hoy me la ha liado, voy trabajando paso trote, paro, y en una de las paradas, me la lío parda con la boca, se metió la rienda en la boca, llego a morder las tijerilllas y se le hizo un bucle en la boca, riendas tijerilllas, y claro yo ya no tenía ningún control sobre el animal que acabo levantándose de manos, creo que no con intención de tirarme sino de la presión y retención en cabeza y boca debido al bucle. Me baje de la yegua, la tranquilice le saque el bucle, continúe a pie con ella calmando con la voz, y cuando estuvo más tranquila volví a subir y continúe mi camino. Y al rato... Volvió a ocurrir, lo mismo. Parada, quiero salir, pateo mordisqueo de rienda bucle en la boca, corvetta.... . Ya vuelvo a bajar, se había hecho hasta sangre esta vez, y ya bajo riñendola fuerte, y dándole dos toques en el hocico con la rienda. Se pone temblorosa, parece que lo ha entendido. Vuelvo a subirme y ya va tranquila, la paro y se queda quieta, continuo.... Y ya a la 4 vez que la paro, se le olvida y vuelve a intentar hacer lo mismo. Me bajo antes de que la vuelva a liar, la riño y ya continuo un buen rato con ella a pie, BASTANTE ENFADADA. Hago un km andando y antes dee subir, saco las riendas de las tijerilllas, y le pongo las tijerilllas en la musserola bajo la barbilla,, para que no me levante la cabeza y ya me hago los últimos dos km montada antes de llegar a casa, un poco de trote y de paso, paradas... Y, aunque vas más tranquila y no cabecea, sigo con el mismo problema, para y sigue, y si no le dejo,, pataleta se impacienta y lo de siempre. A algún consejo o comentario que ayude. Creo que con el cierrabocas se terminaría al menos el problema de que me coja las riendas con la boca, aunque no la impaciencia. Se que es pronto, solo llevo tres meses, y creo que la impaciente también soy yo, pero solo busco pasear tranquila, trotar y galopar cuando toque y que no quiera correr y correr todo el rato. Por cierto, la monte un día con cabezada de cuadra, es obediente... HASTA QUE LA HICE galopar... Y no paro hasta que se terminó la recta y yo ya prácticamente estaba bajándome en marcha . En fin. Bueno. Esta es mi historia. Saludos a todos.