Dicen que hay dias para los morenos,y hoy ha sido uno de ellos.Esta tarde,estaba herrando cuando pasa un individuo (por decirlo de alguna manera) con un saco en el que se movía un bicho.Nos comenta que se trata de un perrito de unas sobrinas suyas que se lo trajeron los Reyes de cachorrito y,lo de siempre,que ya estorba en el piso de Oviedo.Y como resulta que se lo endosaron a él, pues que va a matar al perro por el sencillo procedimiento de atarle una piedra al saco y arrojarlo al rio Nora,que estos días baja crecido.El “endividuo en cuestion” decidía la vida y la muerte de este perro con el áspero alegato de “ Estoy hasta los c..del perru!!”.
Le digo “Pero bueno,como vas a hacer eso a un perro? Eso es una salvajada”.Y me dice: “Quieslu? Doytelu”…””A ver que perro traes ahí”,le digo y abriendo el saco me enseña un perrito de unos dos kilos o asi de peso,de raza “Sabe Dios” y que miraba con ojillos asustados y temblando de miedo.Y mira que no soy muy amigo de perros,.pero a este le vi en los ojos algo que me impresionó.Me tengo reído cuando me contaban que los perros de las perreras hablaban con los ojos a los posibles adoptantes,pero ahora veo que es verdad.Este perrito me dijo algo con sus ojos asustados que me hizo plantearme sobre la marcha la posibilidad de tener un perro.
Alguna vez he dicho,en el foro y fuera de él,que si alguna vez adoptaba un perro,iria a una perrera y escogería al que viera cojo o tullido y que le diria,”Ven conmigo,socio,que tu suerte ha cambiado” .Pues bien, saqué al perro del saco,le acaricié y le dije “Ven conmigo,socio..” Y el perrito,que al parecer atiende al nombre de Rufo,se apretó contra mi pecho buscando refugio y salvación ante la muerte que seguramente intuía.
Pues con las mismas le traje a casa,compartimos el chuletón que tenia de cena y ahora mismo está tumbado a mis pies,mientras escribo esto.Si le miro,levanta la cabeza y me mira,aun asustado,pero cogiendo confianza.En cuanto pueda,voy a llevarle al veterinario a que le pongan las vacunas y lo que haga falta,pero entretanto necesito ayuda.Yo nunca he tenido perro,asi que no tengo ni idea de cómo se cuidan.Tampoco creo que este necesite grandes cuidados,pero de momento se me abren dos interrogantes:
-Pienso darle como base de comida,pienso de ese de perros.Cual le iria mejor,teniendo en cuenta que es pequeñito? Se lo puedo dejar a discreción o hay una medida diaria?
-Yo desconozco las costumbres de este perro a la hora de ir al baño.¿Como se enseña a un perro que en casa no se hacen ciertas cosas y que debe de aguantarse hasta que salgamos afuera?
-Tambien tengo intención de enseñarle a barrer,pasar la fregona y quitar el polvo.. porque se entretenga mientras yo no estoy en casa.Por supuesto no le dejaré ir a echar la primitiva,pues el dinero es capaz de corromper la mejor amistad (Vease el caso de un tal Pancho,al que su dueño busca por la tele)
-Y `por ultimo,como se pone una clave de acceso al ordenador? No quisiera que mi perro se pasara las mañanas chateando o visitando paginas guarras.
Le digo “Pero bueno,como vas a hacer eso a un perro? Eso es una salvajada”.Y me dice: “Quieslu? Doytelu”…””A ver que perro traes ahí”,le digo y abriendo el saco me enseña un perrito de unos dos kilos o asi de peso,de raza “Sabe Dios” y que miraba con ojillos asustados y temblando de miedo.Y mira que no soy muy amigo de perros,.pero a este le vi en los ojos algo que me impresionó.Me tengo reído cuando me contaban que los perros de las perreras hablaban con los ojos a los posibles adoptantes,pero ahora veo que es verdad.Este perrito me dijo algo con sus ojos asustados que me hizo plantearme sobre la marcha la posibilidad de tener un perro.
Alguna vez he dicho,en el foro y fuera de él,que si alguna vez adoptaba un perro,iria a una perrera y escogería al que viera cojo o tullido y que le diria,”Ven conmigo,socio,que tu suerte ha cambiado” .Pues bien, saqué al perro del saco,le acaricié y le dije “Ven conmigo,socio..” Y el perrito,que al parecer atiende al nombre de Rufo,se apretó contra mi pecho buscando refugio y salvación ante la muerte que seguramente intuía.
Pues con las mismas le traje a casa,compartimos el chuletón que tenia de cena y ahora mismo está tumbado a mis pies,mientras escribo esto.Si le miro,levanta la cabeza y me mira,aun asustado,pero cogiendo confianza.En cuanto pueda,voy a llevarle al veterinario a que le pongan las vacunas y lo que haga falta,pero entretanto necesito ayuda.Yo nunca he tenido perro,asi que no tengo ni idea de cómo se cuidan.Tampoco creo que este necesite grandes cuidados,pero de momento se me abren dos interrogantes:
-Pienso darle como base de comida,pienso de ese de perros.Cual le iria mejor,teniendo en cuenta que es pequeñito? Se lo puedo dejar a discreción o hay una medida diaria?
-Yo desconozco las costumbres de este perro a la hora de ir al baño.¿Como se enseña a un perro que en casa no se hacen ciertas cosas y que debe de aguantarse hasta que salgamos afuera?
-Tambien tengo intención de enseñarle a barrer,pasar la fregona y quitar el polvo.. porque se entretenga mientras yo no estoy en casa.Por supuesto no le dejaré ir a echar la primitiva,pues el dinero es capaz de corromper la mejor amistad (Vease el caso de un tal Pancho,al que su dueño busca por la tele)
-Y `por ultimo,como se pone una clave de acceso al ordenador? No quisiera que mi perro se pasara las mañanas chateando o visitando paginas guarras.
