¡Hola a todos! Espero que vosotros hayais tenido un sábado mejor que el mío. 
Por aquí lleva lloviendo toda la semana, así que no se ha podido hacer nada. Hoy llegué sobre las 11.30 y nada más empezar a ensillar, otra vez la lluvia. Todos corriendo, los caballos otra vez a su sitio y a mirar a ver si escampaba. Nada, lluvia, truenos y relámpagos. Por fin sobre las tres dejó de llover y salió un poco el sol, pero para entonces ya se me habían quitado las ganas y como los nubarrones seguían allá en las montañas, no parecía que valiera la pena salir.
Los niños aprovecharon el ratito de sol para poner unos obstáculos pequeños y hacer unos saltos, y como era evidente el exceso de energía que tenía mi Félix, pues le subí a darle cuerda. Se me olvidó la tralla, pero ni me di cuenta porque con las ganas que tenía se movía además muy bien. Un par de veces intentó cambiar de dirección él sólo y lo evité fácilmente diciéndole NO al tiempo que me movía en esa dirección con el brazo extendido. Volvió rápidamente a la anterior dirección.
Entonces la profe me dice que por qué no probamos a ver si quiere saltar (sin montarlo claro) y digo, bueno un obstáculo pequeño. Pero claro para eso necesitó de la tralla. En cuanto la vio en su mano se puso todo nervioso, encarándose con ella y reculando para huir. Una de las veces hizo amago de patada. Aún así y todo el obstáculo pequeño (unos 30 cms.) lo saltó estupendamente. El siguiente creo que debía ser de unos 50 ó 60 cms. ya no le gustó tanto y se paró unas cuantas veces, hasta que finalmente y para nuestra sorpresa subío las manos un montón y saltó.
Me quedé pensando, será que quiere ser un ca...n o que le tiene miedo a la tralla y trata de defenderse. ¿Vosotros qué opináis? Ya nos queda claro que el potro tiene algo de carácter, tal vez demasiado para mí. No lo sé. :?
Por aquí lleva lloviendo toda la semana, así que no se ha podido hacer nada. Hoy llegué sobre las 11.30 y nada más empezar a ensillar, otra vez la lluvia. Todos corriendo, los caballos otra vez a su sitio y a mirar a ver si escampaba. Nada, lluvia, truenos y relámpagos. Por fin sobre las tres dejó de llover y salió un poco el sol, pero para entonces ya se me habían quitado las ganas y como los nubarrones seguían allá en las montañas, no parecía que valiera la pena salir.Los niños aprovecharon el ratito de sol para poner unos obstáculos pequeños y hacer unos saltos, y como era evidente el exceso de energía que tenía mi Félix, pues le subí a darle cuerda. Se me olvidó la tralla, pero ni me di cuenta porque con las ganas que tenía se movía además muy bien. Un par de veces intentó cambiar de dirección él sólo y lo evité fácilmente diciéndole NO al tiempo que me movía en esa dirección con el brazo extendido. Volvió rápidamente a la anterior dirección.
Entonces la profe me dice que por qué no probamos a ver si quiere saltar (sin montarlo claro) y digo, bueno un obstáculo pequeño. Pero claro para eso necesitó de la tralla. En cuanto la vio en su mano se puso todo nervioso, encarándose con ella y reculando para huir. Una de las veces hizo amago de patada. Aún así y todo el obstáculo pequeño (unos 30 cms.) lo saltó estupendamente. El siguiente creo que debía ser de unos 50 ó 60 cms. ya no le gustó tanto y se paró unas cuantas veces, hasta que finalmente y para nuestra sorpresa subío las manos un montón y saltó.
Me quedé pensando, será que quiere ser un ca...n o que le tiene miedo a la tralla y trata de defenderse. ¿Vosotros qué opináis? Ya nos queda claro que el potro tiene algo de carácter, tal vez demasiado para mí. No lo sé. :?
