Si el caballo ha estado un año en un box sin salir, lo primero, imprescindible e ineludible es que un veterinario visite al caballo para que compruebe su estado de salud general. Un año sin movilidad ni estímulos pueden minar la salud del más sano de los caballos. Tanto para ello como para el tema del sobrepeso lo mejor es que contactéis con un veterinario que lo someta a un chequeo completo para aseguraros que podéis devolverlo a una vida sana y "de caballo" haciendo las cosas bien y sin correr riesgos que puedan atentar a su salud. Este es el primer paso, fundamental para que otros profesionales (quiroprácticos, entrenadores, herradores, etc) os vaya pautando protocolos de trabajo sobre la certeza de su condición física acreditada por un veterinario, más aún cuando cuenta con dos problemas: obesidad (os tendrá que recomendar la dieta adecuada) y rigidez (habrá que descartar problemas clínicos veterinarios).
Suerte y un saludo.