Cuando compré mi yegua, con 8 años entonces, ni siquiera sabía pasar barras de tranqueo, no digo ya saltarlas. Una barra de tranqueo era el monstruco comecaballos más aterrador que había visto nunca... Y a mí me gusta el salto, así que decidí enseñarle. Ponía 2-3 barras en el suelo, y pie a tierra, con el ramal, las rodeábamos, las miraba mucho, las olía. Luego a pasarlas en paralelo. Y luego por encima, que al principio eran auténticas eses lo que hacía al pasarlas. Cuando pasaba una, ya fuera bien o mal, la premiaba (con voz, con golosina o con lo que fuera). Luego pasamos a hacerlo montadas, una vez que las pasan pie a tierra luego va todo más deprisa. A los 3 aires, costó poco que se acostumbrara a pasarlas. Cuando comencé a subir unos centímetros la barra y tuvo que empezar a elevarse un poco más se me destartalaba porque aún no controlaba la cadencia de los aires y su regularidad, un fallo por mi parte no haberlo hecho antes. Me ocupé de trabajar a los 3 aires esos aspectos y volví al tema barras cuando ya iba más organizada.
Hoy, con 10 años, la yegua salta limpiamente 110 cm.