Yo he tenido profesores para todos los gustos, unos que les gustaba el cierrabocas bien apretado, otros cierrabocas normal, otra nos hacia quitar el cierrabocas a todas las cabezadas...
Hay que tener en cuenta que si queremos que el caballo relaje el contacto, la unión de la mandíbula del caballo empieza casi detrás de los ojos. Con lo cual, si aprietas el cierrabocas, poca posibilidad tiene el caballo de mover mínimamente la mandíbula para relajarla.
Yo suelo poner el cierrabocas, porque me da la sensación de que estabiliza el filete dentro de la boca del caballo (impide que baile demasiado), pero sin apretarlo. Tampoco me gusta apretar la muserola por lo mismo.
De hecho, la FEI se está planteando medir cuánto se aprieta la muserola, para evitar que haya caballos que vayan con una presión excesiva sobre la mandíbula.