Bueno, después de un parón bastante largo(casi un año) ayer, por fin, ¡volví a montar!.
Llevaba un tiempo dandole vueltas a la cabeza para decidir qué hacer, dónde ir, etc.. y al final llamé a un amigo que tiene una yegua (que es casi mía también), cogí mis botas nuevas y fui con él a la última hípica donde estube montando.
La llegua estaba muuuy larga y la iban a herrar, así que cuando llegamos la chica de la hípica me dijo que si me quería "quitar el mono" en condiciones me dejaba un caballo de los suyos. Total que me presentó a una yegüita alazana que es de un particular que se la deja a la hípica para clases con un poco de nivel.
La preparé y nos fuimos a la pista. Por el camino iba pensando que a ver si me acordaba de cómo se subía, jeje.
La yegua era un sol, no hizo ni un extraño, iba con buena impulsión.. Al principio intentaba recortarme las esquinas, pero pude con ella. Estaba montándola y mientras galopaba me pregunté cómo había podido aguantar tanto tiempo sin subirme a un bichito de estos. Fue una sensación que sólo entendemos los que montamos, vamos, genial.
Después de una hora disfrutando como una enana en la pista, cuando ya la estaba enfriando, mi amigo me dijo que si me apetecía ir al campo, así que le dejarton otro caballito y nos fuimos de paseo (otra hora) y la yegua igual de buena que en la pista.
Así que nada, el día completo,una gozada, mejor no se puede volver, vamos. Me fui a casa feliz.
Y, aunque como me temía, hoy me duele todo el cuerpo, ha merecido la pena ¡¡¡cómo lo necesitaba!!!
Así que esa fue mi tarde de ayer, ahora falta ser constante. Quería dar clases, porque los últimos años he tenido la suerte de tener caballo propio y pupilaje + clases ya es una pasta así que estoy un poco estancada, pero ayer me dijeron que no hay clases entre semana ni de tanda ni particulares, que solo los sábados y domingos, que hay un grupo avanzado en el que me podrías meter, así que con mi super horario de enfermera sólo podré dar una clase al mes y lo demás por mi cuenta. Pero bueno, el caso es montar, así que habrá que ir sacanbdo tiempo de donde se pueda.
Pues nada, ya he comnpratido mi felicidad con vosotros. Ya os contaré cómo sigo.
Un saludo
Llevaba un tiempo dandole vueltas a la cabeza para decidir qué hacer, dónde ir, etc.. y al final llamé a un amigo que tiene una yegua (que es casi mía también), cogí mis botas nuevas y fui con él a la última hípica donde estube montando.
La llegua estaba muuuy larga y la iban a herrar, así que cuando llegamos la chica de la hípica me dijo que si me quería "quitar el mono" en condiciones me dejaba un caballo de los suyos. Total que me presentó a una yegüita alazana que es de un particular que se la deja a la hípica para clases con un poco de nivel.
La preparé y nos fuimos a la pista. Por el camino iba pensando que a ver si me acordaba de cómo se subía, jeje.
La yegua era un sol, no hizo ni un extraño, iba con buena impulsión.. Al principio intentaba recortarme las esquinas, pero pude con ella. Estaba montándola y mientras galopaba me pregunté cómo había podido aguantar tanto tiempo sin subirme a un bichito de estos. Fue una sensación que sólo entendemos los que montamos, vamos, genial.
Después de una hora disfrutando como una enana en la pista, cuando ya la estaba enfriando, mi amigo me dijo que si me apetecía ir al campo, así que le dejarton otro caballito y nos fuimos de paseo (otra hora) y la yegua igual de buena que en la pista.
Así que nada, el día completo,una gozada, mejor no se puede volver, vamos. Me fui a casa feliz.
Y, aunque como me temía, hoy me duele todo el cuerpo, ha merecido la pena ¡¡¡cómo lo necesitaba!!!
Así que esa fue mi tarde de ayer, ahora falta ser constante. Quería dar clases, porque los últimos años he tenido la suerte de tener caballo propio y pupilaje + clases ya es una pasta así que estoy un poco estancada, pero ayer me dijeron que no hay clases entre semana ni de tanda ni particulares, que solo los sábados y domingos, que hay un grupo avanzado en el que me podrías meter, así que con mi super horario de enfermera sólo podré dar una clase al mes y lo demás por mi cuenta. Pero bueno, el caso es montar, así que habrá que ir sacanbdo tiempo de donde se pueda.
Pues nada, ya he comnpratido mi felicidad con vosotros. Ya os contaré cómo sigo.
Un saludo