Os voy a copiar un capítulo de un libro sobre el tema de riendas de atar.
El autor es Paalman en su libro ?Metodo Natural de Entrenamiento del caballo de salto?.
A mí es un libro que me encanta, lo que no quiere decir que esté de acuerdo en cada coma, que hace mucho dejé de tener fe en todo aquello que leía.
Simplemente lo meto para dar otra idea sobre este sistema de dar cuerda en el que un autor que propugna el uso correcto del chambón en este capítulo arremete digamos, contra las riendas de atar.
De paso los partidarios de las riendas de atar podéis defender el sistema.
?Dar cuerda con riendas de atar
Se hace mayormente para conseguir que el caballo acepte el bocado y coloque la cabeza, sin embargo, es una idea errónea. Ninguna rienda de atar, ni siquiera aquéllas que tienen anillos de goma, pueden ser tan sensibles como la mano del jinete. En el paso y en el galope las manos del jinete tienen que seguir en cada tranco el movimiento natural del caballo para mantener un contacto uniforme. Las riendas de atar no pueden hacer esto, interfieren en la boca a cada tranco, dando una presión pasiva y muerta sobre la boca del caballo.
El caballo intentará evitarlo, bien yendo hacia atrás, bien apoyándose sobre el bocado, o bien, abriendo la boca y poniendo rígidos los músculos de la espalda y el cuello. Las glándulas parótidas tampoco pueden funcionar adecuadamente, porque quedan encajadas entre los huesos de la mejilla y el carrillo, lo cual puede hacer daño a los conductos salivares, que están colocados debajo de la lengua, y el caballo nunca formará espuma en toda su vida.
Estos daños no pueden evitarse haciendo que las riendas de atar estén más largas. Estarán tan largas que no molestarán en la boca del caballo cuando levante la cabeza o la coloque en su posición; pero cuando intente estirar el cuello y poner la nariz hacia delante y hacia abajo-como debe-, ciertamente se encontrará con la insensible rienda de atar, forzándolo a volver hacia atrás.
Las riendas de atar estropean al caballo, aún más cuando son utilizadas igual de largas en ambos lados, porque al caballo entonces se le fuerza a ir alrededor del círculo completamente derecho desde la cabeza hasta la cola. Colocado en esta incómoda posición, su centro de gravedad se desplaza desde la espalda interior, que está más adelante, en vez de a la cabeza o al cuello. Consecuentemente, es imposible para el caballo traer su pie interior bajo su cuerpo.
Si se utilizan riendas de atar cuando se da cuerda, entonces la rienda interior debe ser 10 cm más corta que la rienda exterior.
Esto, al menos, permitirá que el caballo incurve su cuerpo lateralmente hacia dentro, de acuerdo con la línea del círculo?.
Bueno, copio hasta aquí, luego sigue criticando otro tipo de cosas.
Repito que mi intención es dar otro punto de vista que ni comparto ni critico por falta de conocimientos.
Un saludo