La posición y equilibrio perfectos son los que permiten al jinete aplicar las ayudas sin interferir en el movimiento del caballo de forma negativa. (Se aplica a cualquier caballo sano, raza, disciplina, ejercicio y cualquier momento. Cuanto más equilibrado es el caballo menos exigente podremos ser con nuestra posición pero aún y así, para cambiar de aires, equilibrio y movimientos del caballo, nuestro equilibrio tendrá que ser igualmente apurado, o no seguiremos al caballo. Si la posición de un buen jinete no es la ideal pero su equilibrio no molesta el movimiento del caballo y cuando pide las cosas no altera la fluidez, es porque no estará tan mal,o porque el caballo está trabajado de tal forma que ya no es necesario ser tan exigente en cuanto a posición de las piernas, talones o manos).
Una vez se aprende a adaptar el equilibrio al caballo, a trabajar y a influir con el equilibrio de uno mismo en el del caballo, no tiene demasiada importancia si montas con una mano, con dos, con las riendas cortas o largas, estribos cortos o largos, en suspensión, en montura de doma, de western, con las piernas más así o asá. Eso ya luego es una cuestión de costumbre y adaptación a la modalidad u al momento.
La posición será variable pero el aprendizaje de la adaptación del equilibrio al del caballo se obtiene afianzando la base. ¿Montando muchas horas? Pues la verdad es que, podemos montar horas y horas pero si no dedicamos una gran parte del tiempo a obtener la base del equilibrio, cuantas más horas montemos y más queramos avanzar en la equitación y nivel, más problemas saldrán.
¿Con cualquier profesional que nos corrija? Pues depende, si echamos un vistazo en las escuelas de iniciados (y no tan iniciados), cuántos mejoran con decirles 30000000 veces que bajen el talón y que tengan la mano quieta y que pongan la espalda hacia atrás, que se sienten, que no se cuelguen de la boca, que monten sin estribos y lo único que logran es botar aún más, romperse la espalda y frustrarse cuando suben de nivel...pues muy pocos mejoran y pasan muchas horas encima del caballo y salen de los clubes pensando que con el tiempo, si siguen montando muchas horas, mejorarán seguro. Qué gran error. Si hubiesen dedicado todas estas horas que han estado machacando sus espaldas haciendo trote sentado, a mejorar realmente su equilibrio, cuando saliesen de la escuela, estarían mucho mejor puestos a caballo y para el profesional que venga, le sería mucho más fácil dedicarse a alguna especialidad en concreto.
Un especialista en posición, si le preguntas en qué se basa para comprar un caballo para determinada disciplina, te responderá que para qué jinete es, que depende de como lleve el equilibrio, de como sepa adaptarlo y qué profesor lo seguirá una vez lo adquiera. Si va mal, no tiene la base de equilibrio afianzada y la posición/equilibrio no es importante para el profesor, habrá que buscarle un pony de aires cortos, o un caballo corto, pequeñito y compacto (o como mínimo, que esté bien equilibradito y sea cómodo). Tendrá que ser un caballo que hará mejor o peor los ejercicios que exije la disciplina adaptando el nivel de dificuldad para cada ocasión para que el jinete no tenga que pensar en muchas cosas al mismo tiempo y reduzca al mínimo la posibilidad de desequilibrarse, pegar tirones y actuar con manos duras que sobran por todos lados, en todos los caballos y en todas las disciplinas. Daría más importancia a la comodidad que a la calidad del caballo aunque no tienen porqué ser inversamente proporcionales.
Seguramente te dirá que sólo mereceremos un caballo de aires más exigentes, no cuando el papá del alumno o nosotros tengamos más dinero disponible, si no cuando estemos bien equilibrados y sepamos pedirle cosas al caballo sin tirarle de la boca, sin darle con la espuela o la pierna sin querer o sin romperle el dorso cada vez que sale al galope o cambiemos de aire o de ejercicio. Ya por no decir, querer cerrar y compactar a los caballos, o hacer un montón de ejercicios complicados sin siquiera sentirlos, estando fuera del equilibrio del caballo y agarrados a la boca metiendo las piernas hasta las entrañas para tenerlo "entre la pierna y la mano".
Bueno, eso si lo preguntaras a un mero especialista de posición claro, a un profesional de renombre no sé qué dirá y como muy aficionada a este deporte...no sé si me interesaría mucho saber qué es en lo que se basa un mega profesional cuando compra sus caballos para su propia disciplina y su propia monta....Si estuviese trabajando o montando con él, no se lo preguntaría, lo iría viendo con el tiempo y sacaría mis conclusiones. Una vez sacadas mis conclusiones, le preguntaría mis dudas para ver si estoy en lo cierto y luego al menos le sacaría jugo a su experiencia y sabría poner las cosas en su sitio. Me movería mucho más si me diesen soluciones que pudiese practicar en el día a día y que se adaptasen a mi realidad, no que me digan lo que el profesional hace para que lo intente imitar con toda la ilusión, la cague y me frustre...Pero es la humilde opinión de una aficionada...