Gracias por darme ánimos carmona83.
Tienes toda la razón, y es que cuando se retrota o acecha un posible peligro, el cuerpo va automáticamente a "modo jinente en defensa": más control en las riendas, piernas más apretadas y cuerpo hacia adelante. Que es todo lo contrario que hay que hacer... ya que fomenta precisamente lo que intentamos evitar, es un acto reflejo que cuesta mucho quitar, sobretodo si al final resulta que lo necesitas, ya que te refuerza el acto de volver a hacerlo. Tengo que luchar a capa y espada contra eso.
Tenemos que relajarnos, porque nos vamos contagiando la tensión uno a otro, nos pasamos las malas vibraciones y hacemos una bola de nieve. Quien fué el primero que se empezó a tensar?, ahora ya no importa, porque estamos los dos, y va a más... . Quizá cuando estamos en sitios difíciles estamos pensando en otra cosa, se nos olvida a los dos quien va encima de quien y nos relajamos.
Sí... creo que el galope no nos está sentando bien... puede que sea la base del problema, una pena, porque me encanta, pero voy a dejar de galopar y trabajar transiciones a los otros dos aires. No me resulta molesto porque las hace muy bien y sin problemas (cuando no hace el mono).
Voy a salir a relajarnos y para liberar más tensión voy a cambiar el bocado de doma (que llevo sin filete), por un pellham partido con cuatro riendas, centrarme en el filete y las otras llevarlas ahí por si saliera a un cruce corriendo o algo raro, que no va a pasar, pero por si acaso.
Y sobretodo cargado de energía positiva, la verdad es que él ayuda mucho porque para ensillar y montar es un santo, de tal manera que empezamos la salida muy relajados, que vale mucho...
Desde mi punto de vista, no puedes tener otra cosa en mente cuando salgas con el caballo que RELAJACIÓN. Tienes que tener grabada esa palabra a fuego en tu mente y durante un tiempo, cada vez que salgas no pensar en nada más que no sea RELAJACIÓN. Intenta relajarte desde el dedo pequeño del pie hasta el último pelo de tu cabeza. Los caballos se dan cuenta si al retrotarse aprietas las piernas o tensas la rienda. Ellos se dan cuenta de todo lo que haces encima...y por ello es muy importante que no noten tensión en ninguna parte de tu cuerpo.
Tienes toda la razón, y es que cuando se retrota o acecha un posible peligro, el cuerpo va automáticamente a "modo jinente en defensa": más control en las riendas, piernas más apretadas y cuerpo hacia adelante. Que es todo lo contrario que hay que hacer... ya que fomenta precisamente lo que intentamos evitar, es un acto reflejo que cuesta mucho quitar, sobretodo si al final resulta que lo necesitas, ya que te refuerza el acto de volver a hacerlo. Tengo que luchar a capa y espada contra eso.
Tenemos que relajarnos, porque nos vamos contagiando la tensión uno a otro, nos pasamos las malas vibraciones y hacemos una bola de nieve. Quien fué el primero que se empezó a tensar?, ahora ya no importa, porque estamos los dos, y va a más... . Quizá cuando estamos en sitios difíciles estamos pensando en otra cosa, se nos olvida a los dos quien va encima de quien y nos relajamos.
En el aspecto de trabajo, pues te recomendaría muchas transiciones. Sé muy pesado con esto. Entiendo que es engorroso trabajar las transiciones fuera de la pista pero es la mejor forma de poner al caballo en nuestras ayudas. El galope puede que avive más ese nerviosismo del que hablas. Así que, me dedicaría a transiciones simples paso-trote y trote-paso
Sí... creo que el galope no nos está sentando bien... puede que sea la base del problema, una pena, porque me encanta, pero voy a dejar de galopar y trabajar transiciones a los otros dos aires. No me resulta molesto porque las hace muy bien y sin problemas (cuando no hace el mono).
Voy a salir a relajarnos y para liberar más tensión voy a cambiar el bocado de doma (que llevo sin filete), por un pellham partido con cuatro riendas, centrarme en el filete y las otras llevarlas ahí por si saliera a un cruce corriendo o algo raro, que no va a pasar, pero por si acaso.
Y sobretodo cargado de energía positiva, la verdad es que él ayuda mucho porque para ensillar y montar es un santo, de tal manera que empezamos la salida muy relajados, que vale mucho...