Nakuru dijo:
No te va a pasar que te compres un caballo y no sepas ensillar ni embridar, porque si te vas a comprar un caballo y eres una persona normal que no tiene sirvientes como en el caso del jinete que conocio Apache, tu eres el primero al que le va a interesar aprender a hacerlo (en cambio si no te interesa aprender ya te pueden enseñar que acabaras ghaciendolo con desgana y pondras la cincha mal, la cabezada doblada ... si no te interesa, no aprenderas a hacerlo bien nunca). A mi no me enseñaron como a hacerlo, y hace muchos años que aprendi y acabe ensillando y embridando mi propio caballo de clases, preguntando a los demas y probando. Pero enseñar, no me enseñaron.
¡Hola a todos!
He seguido este tema desde que se abrió y contesto primero a Nakuru diciéndole que yo he visto a una persona de 40 años comprarse un caballo que le costó un pastón y el día que tuvo que sacarlo a darle cuerda, no sabía ni cómo ponerle la cabezada de cuadra... A mí, sinceramente, eso no me parece normal.
Yo tengo el concepto de que montar a caballo es algo más que subirse físicamente en él; con esto quiero decir que montar a caballo es una forma de comunicación entre dos animales (se supone que uno de ellos racional... porque cuando caballo y jinete son irracionales.... ¡catástrofe!). Yo sólo he tenido caballo propio una vez en toda mi vida, y tenía entonces 16 años y me llevaba toda la semana deseando que llegara el fin de semana para ir al campo a montar... pero también a cepillar a mi caballo, hablar con él, etc... Y aunque casi no podía con el peso de mi silla vaquera, yo misma me la cargaba a cuestas y la ponía sin ayuda de nadie, al igual que el bocado... Las primeras veces lo hacía mi padre, pero llegó un momento en que me cansé de que él dejase de hacer otras cosas por prepararme al caballo.
Cuando volví a montar (veinte años después), me dijeron en la hípica que cada alumno prepara su caballo, aunque al principio siempre me ayudaron y, cuando tengo problemas para meterle el bocado a algún caballo que me saca dos palmos, ahí está siempre alguno de mis profes para ponérselo. Y, al terminar la clase, te toca duchar y secar al caballo. Y esa "política" se lleva a cabo con todo el mundo. Incluso los niños de 8 años cepillan el caballo y colaboran con los profes a la hora de aparejarlo y desaparejarlo... y aún no he visto a los niños agobiados... de hecho, "se matan" entre ellos a la hora de cepillarlos.
Por otra parte, a mí me gusta cepillar al caballlo que voy a montar, si no le conozco, porque así nos conocemos el uno al otro y, si ya es un viejo conocido, el ratito que paso cepillándolo nos sirve para que sepamos como andamos de humor ese día. Igual que acariciar un gato sentado sobre tus rodillas te relaja, lo mismo sucede cuando cepillas a un caballo... o, al menos, eso es lo que siento yo.
Saludos...