¿ PORQUE LOS CABALLOS REHUSAN?
Hay básicamente dos razones:
1 - Instintiva, no se fían de 'ese elemento desconocido' que entraña RIESGO
2 - Estamos pidiendo algo que queda fuera de su código lógico
Cuando un caballo rehusa por la 1ª razón, simplemente está ejerciendo su instinto de supervivencia.
Los caballos en estado natural, se colocan en el centro de una especie de zona de seguridad que les permite, ver, oir, oler... sentir en una palabra todo lo que pueda entrañar un RIESGO a su integridad física y mientras nada les amenace, pastan tranquilamente, se revuelcan en la arena u observan el deambular del resto de la tropilla.
En el supuesto que se acerque algún elemento extraño a los limites de lo que el animal considera su zona de seguridad, lo primero que hace es tratar de identificarlo y analizar la cantidad de RIESGO que puede implicar...
Si no le da tiempo, o considera que el riesgo puede entrañar peligro, simplemente huye con la única y sola intención de mantenerse lejos de lo que aquello sea.
El comportamiento de los demás caballos será galopar en la misma dirección que el primero que salga en franca huida, cuando este se pare se pararán todos y se volverán a tratar de localizar donde quedó el riesgo...
Como los gatos, los caballos basan su seguridad en no fiarse y en vez de asumir riesgos, los evitan a toda costa (siempre que les es posible) o se defienden con todo lo que tienen en caso contrario (saber esto y tenerlo en cuenta puede salvar la vida a mas de un confiado jinete).
Bien,
Cuando un caballo rehusa por la 2ª razón, debemos entender que estamos violando su lógica que es simple:
No quiero hacer algo:
A) Innecesario
B) Ilógico
C) Desagradable
D) Difícil
E) Imposible
Suele ocurrir que no siempre somos conscientes de porqué, algo al caballo le puede parecer innecesario, ilógico, desgradable, difícil o imposible.
Muchas veces la razón nos pasa desapercibida (le duele el cuello, lleva una piedra incrustada entre la ranilla y la herradura, le pusimos la cincha retorcida y le está matando, lleva el gancho de la barbada, dentro del labio, deshoyandole el asiento...
Los caballos nos hablan con las orejas, con la relajación o contración del cuerpo, con la postura de cabeza, ocico o cuello... con las manos... Pero no siempre entendemos lo que nos estan diciendo, como bien podría ser:
¿ Para que rayos tengo que pasar por encima de una montaña de latas vacias, cristales, cajas de cartán, tablas, y escombros... cuando hay camino a ambos lados ?
Casi siempre llevan razón y pocas veces damos nuestro brazo a torcer, simplemente tratando de entenderles...
Resultado: Rehusan. (Opino yo, vamos)

Saludos,
Antonio