Son muy interesantes tus mensajes, Aman... no te preocupes porque se te acabe el "papel virtual".
Sobre los métodos "A" y "B" de llevar un caballo, el B es el único que se puede mantener durante horas... el A acabaría dejando exhausto y molesto al animal, o haciéndole defenderse (según su temperamento). Pero lo interesante viene en cómo tomarse el entrenamiento para llegar a ese B.
Algunos jinetes son partidarios de emplear A en la pista y B en el campo. Razonable, sin duda... pero con sus inconvenientes: de esa manera, el caballo asociará A con seriedad y obediencia precisa, y B con libertad y cierto grado de "ocio". Entonces, si pretendemos lograr una obediencia fina e instantánea con mando suave (B), corremos el riesgo de confundirlo, o de fracasar si le exigimos algo en momentos "delicados" (que los hay, porque los imprevistos surgen cuando menos se esperan).
Yo soy partidario, si el caballo va a emplearse en cualquier labor que se prolongue durante horas (ya sea trabajo general de campo, marchas largas, o competiciones de resistencia, raid, etc.), de educarlo desde el comienzo en la obediencia "B". Las ventajas son varias... el único inconveniente es que difícilmente se consigue la precisión "geométrica" en los ejercicios que se consigue con mando y contacto "A". Pero en el campo suele ser mucho más importante la obediencia inmediata y decidida (desde la relajación).
Sé que va contra la tendencia general, pero me parece que lo mejor, cuando sabemos para qué queremos al caballo, es que su educación se haga (desde el momento más temprano que sea posible y seguro) en el mismo lugar en que queremos que desempeñe su labor, lo cual ahorra tiempo, sustos, y dificultades de adaptación. En el caso del que hablamos aquí, lo montaría lo antes posible en campo abierto, y le educaría en ese entorno, con imaginación, aprovechando los caminos, las cuestas, los árboles, y los edificios, para "inventar" ejercicios de resistencia, destreza, y obediencia... que son casi infinitos, y darían para un libro entero.
Ves, Aman... esto sí que es un tostón de los buenos.
Saludos a todos.